Confesiones I

Nunca se me dio demasiado bien la autocensura, ni las auto imposiciones. Reacciono mediante revulsivos. Me despliego bajo las presiones y me cierro frente a las concesiones. Soy contradictoria a cada paso y tiendo a olvidar con que pie me levanto cada mañana. Me pruebo a cada instante y me disperso con una facilidad de esas que asustan. Me mantengo firme frente a las tormentas, aunque reconozco que los relámpagos me dan pavor... nunca tuve demasiada mano para la electricidad, tiende a expandirse por mi cuerpo y me anula la voluntad.

Soy de tierra, no lo puedo evitar, me vino dado... y es por eso que anhelo los medio acuosos en los que hundirme... en los que soñar. No puedo evitar demasiadas cosas a lo largo de un día; pero en realidad lo hago, y solo cuando me abandono al sueño me doy cuenta de todo lo que callé, de todo lo que no hice, y me reprendo para luego tratar de entenderlo. Pues esa será siempre mi eterna lucha, conmigo y con mi vida. Andar dividida, siempre en conflicto, partida en dos como tantas veces dije...

Soy de una complejidad tremendamente sencilla, y no entiendo por que extraña razón cada vez que busco la calma me estampo con tempestades. Si, ya se todo aquello de que en el fondo tenemos lo que queremos. Si, ya me hablaron sobre las situaciones que inconscientemente uno va atrayendo allá por donde para... Lo se, lo se... pero no puedo menos que preguntarme, en caso de que fuera cierto, que clase de inconsciente tengo...

Odio hablar por las mañanas, supongo que es de las cosas que mas me irritan.. Maniática por naturaleza, imagino que de alguna forma eso también me vino dado. Arisca, con un carácter casi felino soy caprichosa para repartir mis cariños, intransigente conmigo misma trato de equilibrar la balanza siendo tolerante con todo lo que me rodea. Empática, tratando siempre de amoldarme a las circunstancias, desconfío de mis propios pies cuando me tiran a caminar sola. Y se que puedo, y a menudo se lo que quiero, pero son tantas las vueltas que tiendo a dar que no me extraña que la gente piense de mi que no soy mas que un conjunto de pasiones volubles e inconsistentes. Y claro, todo eso de vez en cuando, me revienta como una patada en el estómago mal dada; y me desquito de la única forma que puedo, rompiendo de costillas para adentro.

soñado por Aislyng sobre las 01:36