Abierto hasta el amanecer

Salir. Beber. Fumar. Bailar. Reír. Mirar. Olvidar. Disfrazar las emociones con rímel y barra de labios. Vestirte de sonrisa en blanco. Mirar a la nada. Buscar... aquello que sabes, no encontrarás.

Esperar lo que no ha de llegar. Imaginar. Soñar. Inventar el final de la noche. Dormir, mientras despierta te mueves al son de la corriente. Beber, y sentir que puedes sentir todo. Fumar, para envolver el tiempo en humo y mirar a través de la cortina. Descorrer al son de la repetición; moverse y aislarse del mundo. Cerrar los ojos, pedir un deseo... Olvidar, que aún quedan cosas por olvidar y recordar. Solapar la realidad con la ficción. Crear un momento, ahogarse en el desliz de pronunciar su nombre. Provocar, incitar la sonrisa, la mirada y darte cuenta de que no, no es la que ansiabas.

Levantar las manos a la espera de un movimiento. Abrir los labios para cerrarlos. Quemar el impulso, estrangularlo en sal y tequila. Observar a la noche avanzar despacio y de puntillas a la espalda. Girar las palabras. Jugar a ser, jugar a querer...

Pensar que no has de pensar nada, hablar en valde a medias luces. Bajar y subir la cintura sumergiendote en ritmos ajenos... rozar, caminar en torno a la línea y volver en el momento preciso. Conocer, hasta donde quieres llegar. Saber hasta donde pueden llegar.

Y al final... volver aturdida, dormida, agotada sintiendo cada músculo, cada nervio, cada parte del ser con dolorosa conciencia. Creyendo en el tiempo perdido. Recogiendo las ilusiones, emborronando el espejo con miradas vidriosas y maquillaje deshecho. Despojarse de los pensamientos colgándolos en el picaporte de la puerta. Haciendo guardia, velando mi sueño, acariciando mi inconsciencia se quedan los anhelos aún vírgenes...

El sueño sigue siendo más fuerte que yo.

soñado por Aislyng sobre las 08:00